Auto-coaching
Se puede traducir como entrenarse a sí mismo. También podemos entenderlo como “autoinstrucción” o “automejoramiento”, es decir, el proceso a través del cual uno a solas, sin la ayuda directa de otra persona, se motiva a sí mismo en busca de objetivos o metas.
En definitiva, es ser tu propio coach o entrenador.
Pero, ¿podemos convertirnos en entrenadores de un equipo de fútbol sin antes haber jugado en un equipo y haber rodado por diferentes categorías o equipos? La respuesta es sencilla. No.
En esto consiste en esencia el self-coaching o auto-coach
Es conocer y desarrollar nuestro potencial nosotros mismos. Y todo esto se hace mediante preguntas que nos estimulan, ejercicios de consciencia, autoconocimiento y un buen plan de acción con el que emprendemos un camino en busca de un objetivo.
Te adelanto ya que, para ello, necesitaremos desarrollar nuestros sentidos, aprender a preguntar bien y, a su vez, encontrar y practicar nuestras capacidades.
Con esto que te propongo y lo que te iré desgranando durante estas páginas, podremos conseguir la superación de nosotros mismos, un automejoramiento, una autoterapia y una confianza real en nuestro poder personal. ya que es imprescindible, de conocerse a sí mismo y en esto cada cual puede utilizar lo que esté a su alcance y en lo que crea: desde un araña o rueda de la vida a una análisis que consideré. Pues si no sé cómo soy, ni las herramientas particulares de las que dispongo, ¿cómo voy a desarrollar todo mi potencial?
Debemos tener claro que, la principal diferencia entre el coaching y el autocoaching, es que en este segundo, es un coaching a uno mismo, no hay un coach personal que colabora de forma directa en nuestro caminar. En el autocoaching se trata de ser una especie de autodidacta de nuestra vida y ser el responsable último del: yo aprendo, yo me descubro, yo me instruyo, yo me acompaño, yo me motivo y yo consigo.